Señales de que tu hijo necesita ortodoncia

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Señales de que tu hijo necesita ortodoncia

En nuestra experiencia, son muchos los padres que guardan muchas dudas sobre si su hijo necesita ortodoncia o no. La verdad es que, si no se es un experto o se ha tenido experiencias anteriores, es posible que no seamos capaces de captar las señales que indican la necesidad de acudir a un ortodoncista. Por eso, nos gustaría aprovechar estas líneas para explicártelo. ¿Preparados? ¡Comenzamos!

Lo primero que debemos tener en cuenta es que cada vez existe una mayor conciencia sobre la importancia de la salud bucodental en nuestra sociedad. Esto implica que los padres se preocupan sobre este tema, informándose y acudiendo a clínicas especializadas a edades tempranas. Cuanto antes comencemos a concienciar a nuestros pequeños, mejor.

Según la Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial, la edad ideal para acudir a una revisión ortodóncica es a los 6 años, no sobrepasando jamás los 7. De esta forma, un profesional será capaz de detectar de manera precoz y precisa cualquier inconveniente esquelético o de maloclusión que pudiera existir.

Pese a ello, puede que antes o después de esa edad se presenten algunas señales de que tu hijo necesita ortodoncia. Algunos de los principales son los siguientes:

  • Cuando al abrir o cerrar la boca, se produce una desviación de su mandíbula
  • En casos en los que el pequeño presente una mandíbula muy grande
  • Si tu hijo o hija introduce la lengua entre los incisivos superiores e inferiores a la hora de hablar o cuando se dispone a tragar
  • Otra de las señales de que tu hijo necesita una ortodoncia es que ha perdido muy pronto o muy tarde los dientes de leche
  • En casos en los que masticar alimentos o morder genere problemas
  • Si el niño ronca o padece de apneas mientras duerme
  • Si los dientes permanentes tardan mucho en salir
  • En casos de dentaduras apiñadas
  • ¿Tiene tu hijo los incisivos superiores muy inclinados o sobresalen de la boca? En ese caso, deberás acudir a un especialista
  • El hábito prolongado en el tiempo de chuparse el dedo puede provocar problemas en los incisivos
  • Si el pequeño o pequeña no pronuncian adecuadamente
  • Si respira por la boca en vez de por la nariz


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