La ortodoncia para adultos, en auge en España

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La ortodoncia para adultos, en auge en España

Es una tendencia que ha terminado por confirmarse. La ortodoncia para adultos se encuentra en auge total en nuestro país, con más de una década de aumento sin freno. Así, por ejemplo, según la Sociedad Española de Alineadores (SEDA), el 35% de los adultos entre 25 y 45 años han apostado en los últimos cinco años por un aparato para corregir la alineación de sus piezas dentales.

En este sentido, las férulas invisibles son los auténticos protagonistas de este aumento de los pacientes interesados en comenzar un tratamiento de ortodoncia para adultos. ¿El motivo? Se trata de la solución perfecta para terminar con el engorro de las ortodoncias más tradicionales y sus partes metálicas, nada estéticas y, en ocasiones, incluso molestas en las primeras fases.

Unos dientes mal alineados no implican únicamente un problema estético, sino que también ocasiona inconvenientes y problemas bucales que afectan al resto del organismo, como gingivitis, dolores de cabeza, bruxismo… La ortodoncia para adultos está encaminada a solucionar de un plumazo todas estas situaciones.

La edad no importa. La ortodoncia para adultos también es para ti

“Soy demasiado mayor”, “se me pasó el momento”, “ahora ya no es lo mejor”. Demasiadas excusas que los mayores nos damos a nosotros mismos para no arreglar un problema de salud bucodental que arrastramos desde hace mucho. Actualmente, la edad no es un factor definitorio para un tratamiento de ortodoncia.

De hecho, gracias a las nuevas técnicas aptas para todos los públicos, con una buena calidad de hueso y encía, no hay restricciones algunas por la edad para iniciar un tratamiento de recolocación de nuestros dientes. Así de claro.

¿Qué hay de los inconvenientes? La realidad es que no existen más que en lo que se refiere a los más jóvenes. La ortodoncia para adultos no será ni más cómoda ni menos incómoda. De hecho, las nuevas técnicas han conseguido precisamente que todo el procedimiento sea mucho más llevadero y natural.

Además, tienes que saber que si lo que te preocupa es el tiempo que tendrás que llevar el aparato, los plazos también se han acortado, oscilando la media entre los 18 y los 24 meses, siempre y cuando se acudan a las revisiones mensuales que sirven para comprobar que todo va por buen camino y que no hay que realizar ninguna modificación en los arcos.



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