13 May Higiene bucal con brackets
A pesar de los grandes pasos que se han dado en el campo de la odontología y de que cada vez más personas apuestan por la ortodoncia invisible, la ortodoncia con brackets sigue siendo la mejor opción en algunos casos. ¿Qué pautas de higiene implementar?
Puede parecer que, con este tipo de aparatos, la higiene bucal es más complicada debido a la presencia de alambres, bandas metálicas y demás elementos de la ortodoncia fija. No es del todo falso ya que los aparatos dentales favorecen la acumulación de placa bacteriana ya que pueden quedar restos de alimentos después de las comidas. Por eso hay que ser muy persistentes al cepillarse cuando se llevan brackets.
Cómo cepillarte los dientes si llevas ortodoncia con brackets
Los brackets facilitan que los alimentos queden retenidos. Si no mantienes una buena higiene bucal, se formará placa bacteriana y, en consecuencia, se dará una inflamación de las encías y la posible aparición de caries.
Para realizar un buen cepillado se puede empezar enjuagando la boca de forma enérgica con agua para retirar gran parte de los restos de alimentos que queden entre los brackets y el arco. Después, ya con el cepillo, lo colocaremos entre la encía y el diente para limpiar la zona de unión entre ellos. Recuerda que ahí es donde más placa se acumula. Hay que hacerlo con movimientos circulares y suaves. Acto seguido toca hacer lo mismo pero en la parte inferior del bracket llegando hasta el borde del diente.
Lo que hay que hacer después es limpiar la cara masticatoria de los dientes y la parte interna. Se puede echar mano de cepillos interproximales para que sea más fácil limpiar entre el arco metálico y el diente. Por si no lo sabes, se trata de cepillos destinados a limpiar zonas pequeñas y de difícil acceso. Aconsejamos además el uso de hilo o seda dental. El mejor es el que tiene la punta más rígida para pasarlo a través del arco y limpiar entre los dientes.
Como cuando hablamos de pautas de higiene bucodental en general, tienes que cepillarte después de cada comida. Sobre todo, hacerlo a conciencia antes de irte a la cama. Una correcta higiene influirá directamente en el éxito del tratamiento de ortodoncia
No es tan importante el tipo de cepillo que uses sino la técnica. Puedes echar mano de uno eléctrico o manual pero hazlo bien y siempre después de comer. De hecho, incluso hay cepillos específicos para ortodoncia. Estos suelen tener el cabezal más pequeño con las cerdas en forma de V para llegar mejor al diente. Has de cambiar el cepillo más a menudo porque con los brackets metálicos las cerdas se desgastan más rápido. De todos modos, además de lo que hagas en casa, es conveniente que cada 6 meses te sometas a una limpieza profesional.